LA MARCA ESPAÑA Y EL PACTO DE ESTADO

 

La credibilidad  debe de ser unos de los pilares fundamentales  de cualquier reto, puede situarnos a un lado u otro del éxito  a la hora de vender un producto, una  frase, idea o a nosotros mismos.

España hasta el comienzo de esta crisis  había sido un modelo  Económico    donde se miraban muchos países  y era un destino donde mucha gente veía  un futuro prometedor y lleno de oportunidades. Con esos credenciales, comencemos a crear LA MARCA ESPAÑA fuerza, solvencia, éramos escuchados como creadores de progreso, nuestras empresas en el extranjero eran y son punteras y referencias en su áreas ,muchos centros internacionales de prestigio ,hospitales ,centros de investigación proyectos de construcción, llevan sello español  el Castellano gana terreno frente al inglés como idioma  internacional  etc etc.

LA MARCA ESPAÑA estaba despegando, muchos esfuerzos realizados con campañas promocionales, “tour” de nuestras personalidades, embajadores de renombre (deportistas, artistas, empresarios, expresidentes) todos  ensalzaban  nuestro milagro económico y social, parecíamos invencibles. España había construido un prestigio sobre la base de unos enormes logros políticos y económicos, un respeto y confianza que nos permitía a todos los españoles ir con la cabeza muy alta por el mundo. Después de miles de artículos positivos en prensa sobre el milagro político y económico, LA MARCA ESPAÑA quería decir modernidad, alegría, calidad de vida, trabajo duro y un  futuro prometedor.

Ahora todo ha cambiado  decir España en las esferas internacionales es sinónimo de prudencia, cautela, cuidado, e incluso apatía.

 En los últimos años, la credibilidad de España  en el extranjero ha sufrido un retroceso demasiado importante como para poder decir que es algo pasajero. Nuestra economía  ya no es la que era (si algún día lo Fue) hemos pasado de ser uno de los países donde hacerse rico en el menor tiempo posible (recordad las palabras del ministro Solchaga) era parte de la MARCA ESPAÑA

Ahora hemos pasado  a ver como nadie quiere invertir en nuestro país, las fortunas y fondos de inversión se van a otros sitios más seguros. Demasiado lastre en nuestra economía, déficit, deuda, y sobre todo 6.200.000 parados an dejado  LA MARCA ESPAÑA, como un peso muerto en Europa.

El 21,1 % de la población española vive por debajo del umbral de pobreza en 2012

La tasa de pobreza aumenta entre las personas en edad de trabajar, entre 16 y 64 años, pasando del 19,4% en 2010 al 21,0% en 2012. Y va en aumento

Uno de cada cuatro menores de 16 años se sitúa por debajo del umbral de pobreza. Situando nuestra tasa de desempleo Juvenil más allá del 52%

Nuestra credibilidad como nación, deja mucho que desear hacia nuestros socios europeos y sobre todo a los inversores, que en realidad son  los únicos que junto a nuestra voluntad de superación son la única fórmula para salir de esta situación.

Ahora nuestra presencia en prensa es para decir como el milagro español, se ha diluido, nuestro crédito internacional ha sido dilapidado en: Obras faraónicas, autopistas fantasmas, aeropuertos por doquier, AVES   que nunca serán rentables, empresas públicas  para generar deuda y no beneficios todo  sin ningún tipo de análisis objetivo, desviaciones presupuestarias, números que no eran de fiar, corrupción, endeudamiento difícil de resolver.

LA MARCA ESPAÑA  está en estado de coma, pero no Muerta, esta con respiración asistida, pero no Vencida.

Desde Europa nos piden nuevos ajustes y reformas estructurales en muchos sectores (administración, servicios profesionales, reestructuración de la sanidad etc etc,..) y sobre todo recortes de gasto donde más se note  ese ahorro (educación, Infraestructuras, asistencia al desempleo) serán unas medidas que si o si nos las impondrán ,nos las aran tragar con o sin Aceite de reciño serán duras y dolorosas, Seguramente abra otras soluciones menos dolosas para el ciudadano, pero la macro economía, la Globalización no las contempla, debemos de abdicar para seguir reinando.

En este Juego tambien ellos deben de mover ficha, tiene que confiar en nosotros, en nuestra capacidad y nuestra necesidad, comprometerse  a no quietarnos el oxígeno, ellos tambien saben que una enfermedad puede ser contagiosa y extenderse como una pandemia.

 Por nuestra parte tendremos que poner toda nuestra capacidad, ingenio y trabajo al servicio de esta causa tan dramática y asfixiante, tendremos que transmitir a nuestros socios Europeos que somos capaces  de trabajar Juntos,  deben de ver en nosotros los españoles que queremos estar a su lado en Europa, que vamos a realizar esfuerzos  y el primero de todos debe de ser un PACTO, un PACTO entre nosotros, un PACTO DE ESTADO.

Los partidos deben de empezar desde ya a aparcar sus diferencias, ahora las soluciones no pueden esperar, los problemas desbordan todas las previsiones. En momentos tan difíciles la política debe  de ser de altura, debe de sobresalir por encima de las visiones  de partido y hacer política de Estado. Deben de mirar a los ciudadanos que les pusimos hay, ver, intuir y escuchar nuestra petición.

Deben de sacar todo el potencial que aglutina la política, para poder llegar a acuerdos, el primero de ellos un PACTO DE ESTADO, todos juntos, ya lo hicimos una vez (los pactos de la Moncloa) y nos fue bien, la política estuvo  a la altura y los políticos tambien. Los de ahora  es su momento es el momento de que demuestren que tiene altura de miras y capacidad para que todos, partidos políticos, agentes sociales, agentes económicos, nos demuestren que tenemos políticos de peso.

 

 Nos va todo nuestro futuro profesional y económico, no ya como país, sino también como individuos, es necesario que  sistema político pase los exámenes de limpieza y profesionalidad tan corriente en los países del entorno que nos queremos reflejar. Las pruebas y tensiones a la las que estaremos sometidos estos años siguientes, las decisiones que tomemos en estos temas determinarán que este país mantenga  la MARCA ESPAÑA en el futuro.

NECESITAMOS  UN PACTO DE ESTADO Y LA MARCA ESPAÑA.

Lo siguiente si ese pacto no se puede alcanzar es el CAOS, político, social y personal.